Cuando creí que se volvería a enojar conmigo, se acerco a mi, me tomo de la mano y me miro directamente a los ojos, estaba feliz pero no entendía muy bien, pensé que estaba loca, “me había enamorado de la persona de la quien siempre ella estaba loca” por que estaría feliz?
Se río a carcajadas, aun seguía confundida sin entenderla, a la vez me asustaba, que era en lo que estaba pensando?, “Habrá entendido mal lo que le había dicho”?
Lizzi: jajaja Neily no te asustes, no te hare nada.
Neily: no estas enojada?
Lizzi: jaja no, seria estupido enojarme por eso, tu tienes la oportunidad, yo por dentro siempre supe que jamás la tendría, me da un poco de envidia, cualquier fan desearía estar en tu lugar, y hoy que tienes la oportunidad te ayudare, eres mi amiga.
Me había olvidado que ella era así, se ponía en los pensamientos de los demás, y ella en ese momento se puso en mi zapatos, sabia perfectamente lo que sentía por Tom en ese momento, esa era una de las tantas razones por la cual yo la quería, yo solamente se lo agradecí con una enorme sonrisa.
Lizzi: no perdamos mas el tiempo, te llevare a un lugar a donde siempre voy, es mi lugar favorito.
Neily: donde?
Lizzi: se encuentra en el centro comercial, se que te encantara, además hoy nos iremos en el carro de mi mama, no lo necesitará el día de hoy, así que ya tenemos en que irnos.
Paresia como si este día fuera planeado, creo que ella había mejorado mi día, sentí que pasaría uno de esos días estupendos, como cuando iba con mi mama de compras, era increíble, pensé que seria lo mismo, no dude ni un segundo cuando yo ya estaba en el carro esperándola a que cerrara la puerta de su casa.
Me di cuenta que tenia unos cds de Tokio Hotel, “hay no, ya va a comenzar “ solo pensaba como me Iván a enfadar sus canciones, a lo cual estaba muy equivocada, recordaba en cada canción algún momento que pasaba, a veces me identificaba con alguna canción de ellos, me chocaba cuando pasaba una canción, pero no entendía por que, creí que ya no me gustaba.
Mientras íbamos en el camino, ella me platicaba de la ultima vez que había ido a ver a TH, había experimentado algo grandioso, aunque no había tenido la oportunidad de conocerlos en persona, cuando me platicaba del concierto, sentía esos nervios que sentí aquella vez, me gustaba que me platicara, era como decir que no me aburría nada.
Cuando llegamos al centro comercial todas las tiendas eran geniales, pasábamos tienda por tienda, y aunque lo de la ropa no era lo mío, me gustaba la ropa de ahí, hasta que por fin habíamos llegado a esa tan preciada tienda, se podía ver la ropa de lo que estaba de “moda” e incluso ropa de mi color favorito, era increíble.
Por diversión intentábamos probarnos ropa que ni siquiera compraríamos, solo por gustos, nos divertíamos mucho, fotos en cualquier parte donde estábamos, sin ninguna excusa, acercaba la cámara y tomábamos fotos de ella y yo.
Estaba riendo como loca por toda la tienda, viendo esas fotos donde Lizzi hacia caras raras, hasta que vi un vestido negro, corto, en la parte de abajo paresia perfecta en la costura, una vuelta simple y se podía ver todo aquello con lo que vinimos al mundo, me paresia hermoso, me preguntaba ¿Cómo algo tan pequeño puede ser tan perfecto?
Lizzi se percato de lo interesada que estaba con ese vestido, me miro intentado a que yo la mirara, pero nada me hacia desviar esa mirada de ese vestido, intento pasar varias veces su mano para por fin desviar la mirada, lo había logrado, pero aun seguía interesada por ese vestido.
Lizzi: heyy!! Te estoy hablando
Neily: lo siento, pero ese vestido me llamo mucho la atención.
Lizzi: y por que no te lo pruebas?
Neily: que estas ciega o que? No has visto el precio?
Lizzi: hay Neily no vayas a empezar, fuera excusas y aprobarte ese vestido.
Neily: pero honestamente no quiero irme vestida así en la fiesta, no me gustaría, me vería muy formal.
Lizzi: cállate y pruébatelo yaa!!
Suspire no teniendo opción, me dirigí hacia los probadores y cuando salí, sentí demasiadas miradas a mi alrededor incluso mi amiga Lizzi, me le quede viendo rara, hasta que me mire en el espejo, me costaba trabajo creer que la del espejo era yo, a decir verdad se me veía increíble el vestido, paresia como si estuviera hecho a mi medida, me quedaba a la perfección, nada me sobraba, ni siquiera me quedaba ajustado.
Me sentí feliz por aquel vestido, incluso había partes de mi cuerpo de las que nunca había notado hasta hoy, por primera vez me sentía bien conmigo misma, aun seguía sintiendo esas miradas, me imagine que era por lo mismo que yo veía, difícil de creer.
Lizzi: serias una tonta si no compras ese vestido.
Neily; el problema aquí es que no tengo dinero, es mucho para pagar, ni siquiera me alcanza.
Lizzi: descuida, la tarjeta de mi papa paga
Neily: estas loca o que?
Lizzi: tranquila nena, después se lo pagare a mi papa, no creo que me diga nada, o eso creo jaja
Neily: tu eres la que me mete en problemas jaja
Antes de que pudiera decir algo mas estaba Lizzi pagando en la caja el vestido negro con la “tarjeta de su papa” me parecía algo gracioso estar pagando con su tarjeta
Lizzi: listo ahora busquemos algo para esta noche.
Empezaba a recordar aquellas cosas que me encantaba de Lizzi, su actitud conmigo era fascinante, una amiga única, y si la perdía de nuevo era como perder un millón de dólares, para mí valía mucho.
Buscábamos ropa, pero no me decidía, era muy difícil poder escoger entre tanta ropa, hasta que después de mucho rato, apareció la ropa perfectamente.
Neily: me veo bien o no? Se sincera
Le preguntaba mientras me miraba en el espejo, de arriba hacia abajo, esperando su respuesta. Me puse a pensar en la ropa que tenia: “ esa blusa lo dejara de boca abiertas, es muy corta y pegada a mis… supongo que le gustara al igual que esta falda que termina 6 cm de mis rodillas, esos tacones , esos zapatos que hacian juego con mi bluson blanco, y mi falda de mezclilla, con esta ropa seria difícil que me reconocieran, podría mostrar mi verdadero cuerpo”
Lizzi: con esta va a hacer la cuarta vez que te lo digo, te ves bien!!! Y si no te apuras no iremos al salón de belleza.
Neily: iremos?
Lizzi: así es, por que si quieres cambiar de look tienes que cambiar de pies a cabeza, además te hará bien quitarte ese nido que tienes en la cabeza
Neily: para tu información se llama cabello, y esta bien me llevare esto.
Cuando entramos estaba un poco nerviosa, pues hacia siglos que no me metía a uno, me senté un poco insegura, pero seguía hay.
Unos cuantos cortes de pelo en mi cabello, un color de tinte mas oscuro, un chinos mas ondulados, y un toque de maquillaje fue justo lo que necesitaba para quedar totalmente diferente, me acerque al espejo intentado creer que era yo, era una transformación total para mi, tocaba mi rostro, recorriendo por mi mano mi rostro, no podía creerlo, estaba muy sorprendida, me mire de un espejo completo, y solo me mire de pies a cabeza.
Estaba muy contenta por este cambio tan radical pero a la vez fascinante, nunca había experimentado en la vida algo similar, sentía un poder, pero poder de conquistar a Tom y muchos de los que se me vengan en gana.
Al parecer en ese momento tenia muy alto mi autoestima, por lo regular normalmente siempre lo tenia baja, pero hoy, hoy me sentía hermosa, era algo que no podía describir, esta sensación.
Cuando ya veníamos de regreso le pedí a Lizzi, que si por favor me dejaba en el estudio, era tarde y si tomaba un taxi, me tardaría mas en llegar, además seria la oportunidad perfecta para que Lizzi conociera el tan prestigiado lugar donde se encontraba el grupo, después de tanto verlos en fotos seria agradable ver el estudio en persona.
Vi en su rostro mucha alegría, era increíble como se veía mejor en la vida real que en fotos, para ella era sorprendente, y lo seria más si conociera por dentro, pero seria otro día, ya que esta noche tenia que ser mío.
Baje del carro despidiéndome de Lizzi, intente pasar al estudio, pero me costo mucho trabajo para que me reconocieran los que cuidaban hay, tuve que darles muchas pistas para que me creyeran, llegue hasta la puerta principal, no entendía por que tardaban tanto en abrirme hasta que por fin escuche esos pasos rápidos corriendo hacia esa puerta, la abrió muy rápido, solo me miro extrañado, no estaba muy seguro si era yo.
Neily: me vas a dejar pasar o no?
Cuando escucho mi voz se quedo totalmente paralizado, no podía creer que era yo, estaba boca abierta, intentado creer lo que miraban sus ojos.
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